UNA DE POLIS



A ver cómo me explico yo... en primer lugar, el vídeo que hay arriba no es el vídeo que quería poner exactamente, lo que yo quería mostraros de esa excelsa obra que es "Poli de guardería" es el diálogo que viene a continuación, en el que, el malo malote de la coleta (algún día alguien hará una tesis sobre las pintas de los malos de las películas de los noventa, supongo que con especial detenimiento en la némesis de "Commando") el malote de la coleta, digo, le toca las pelotas al bueno de John Kimble, diciéndole que, ahora que por fin le ha capturado, toda su vida carece de sentido y significado. Y que todo lo que ha perdido por el camino (su mujer, su hijo, una vida normal) no merecía la pena para llegar a ese momento (máxime cuando -aviso, spoiler para las dos personas en España que no han visto todavía esta joya- la madre del "Julio José Iglesias este de la vida", va a conseguir sacarlo de la cárcel).

No sé si vais viendo a dónde quiero llegar. Me refiero al momento final de la oposición, ese que tanto ansiamos, pero que tanto nos puede costar también. Siguiendo con los paralelismos con el cine, no sé si os acordais de un momento de "Cadena Perpetua" cuando (otro spoiler) el viejecito de la biblioteca, casi le rebana el cuello a uno de los compañeros para seguir estando en la trena. Morgan Freeman explica que lo que le ocurre es que está "institucionalizado", que tiene toda su vida organizada alrededor de la condena y que no soporta (no la soportará) la vida en libertad.

No estoy diciendo que me esté pasando eso de forma tan drástica, pero sí en un cierto pequeño (y acojonante) grado. El acojonante se refiere a que aún estoy con el práctico a la vista, y por tanto, lo único que he hecho es rebajar el ritmo de tensión (hacer casos prácticos, a estas alturas, es casi como estar de vacaciones). A saber qué pasará cuando (toquemos madera) apruebe y tenga al menos un par de meses a la vista sin un objetivo apremiante a la vuelta de la esquina. Uno construye esta vida en torno a la rutina y al final la rutina se puede convertir en tu vida (toma reflexión profunda).

Teniendo en cuenta además que es totalmente cierto que todo aquello que era imprescindible que hicieras cuando estabas estudiando (y me refiero a cosas de ocio) ahora dan tannnta pereza (llevo dos días con un capítulo de Big Bang Theory descargado y aún no lo he visto!).

Bueno, retomando de nuevo al bueno de Morgan Freeman, todo se reduce a "empeñarse en aburrirse o en empeñarse en disfrutar"



Pd: ehh, que conste que he exagerado lo más grande, es que me parecía un tema interesante para una entrada y estas molan más en primera persona. Lo digo porque teniendo en cuenta que se han apuntado al blog tanto mi hermana como mi compañera de oposiciones (las cosas de revelar secretos en momentos de euforia), no vaya a ser que se preocupen con mis pamplinas :P

9 magníficos comentarios, of course:

RosaLe dijo...

Pues aunque no comprendo bien el nexo entre el primer párrafo y los demás, me parece que la esencia es tratar de explicar esa sensación que tiene uno cuando aprueba y recibe a cambio horas de libertad y que es tan extraña y absurda como el sídrome de Estocolmo, por ejemplo.

Es cierto que tantos años de rutina diaria hacen que ahora mi vida parezca la más desordena del mundo ( en realidad lo es ) y me da mucha pereza hacer cosas que antes estaba deseando ( "a ver si acabo pronto de estudiar para hacer esto o lo otro..." ). Pero para mí lo peor es perder la ilusión de estar deseando hacer esas cosas. Fíjense qué tontería!!

Sin enrollarme más ( creo que me voy a tener que hacer un blog ), llego a la conclusión de que el tan ansiado aburrimiento también cansa y que el tiempo libre sólo se aprovecha bien cuando es escaso.

Corpus dijo...

Supongo que es el Sindrome de Estocolmo del que habla Rosale. A eso me iba a referir antes de leer su comentario. Creo que el opositor aunque no lo quiera termina haciendo de la oposción una forma de vida en la que corre el riesgo de acostumbrarse. Es como cuando a un pájaro que lleva toda su vida en una jaula le dan la libertad por mucho que la haya querido. Toma reflexion jaja
Supongo que cuando se aprueba hay que aprender a utilizar la libertad. Pero bueno Warle eso será cuestión de tiempo. Ya se sabe que a lo bueno uno se acostumbra pronto. Un abrazo
Y si te aburres, tego por aqui unos temas que...jejej

Anónimo dijo...

Yo también cuando aprobé me sentí extraña y aún me sigue pasando.. es unas sensación rara, tener todas las horas ocupadas y un objetivo tan claro y de repente se acabó. Mis comañero de opos dicen que a ellos tb les pasó asi que debe ser otro daño colateral más de esta locura.

No se supongo que el secreto está en volver a recordar cuales eran nuestro hobbys, y volver a disfrutar del ocio y de la tranquilidad... porque yo lo que arrastro todavia es el tener que ocupar todas las horas si no me parece que son perdidas...!!!!

Suerte en el examen. Nos vemos en Madrid. Y por supuesto enhorabuena!!

Pignorante dijo...

Llevas mucha razón, cuesta cambiar de vida cuando te has dedicado a ello tanto tiempo, y te habituas y tus rutinas son tu vida.Piensa en el que lleva casi el doble que tú haciendo lo mismo.Tanto que no me imagino una vida sin opositar, tanto que soy incapaz de disfrutar el aprobado(toquemos madera que ya me estoy pasando con lo de vender la piel del oso)y seguiré opositando no sé cuanto tiempo más ...Seguiré porque me metí en esto queriendo ser juez, porque ya es una cuestión de cabezonería entre yo y el destino (a veces habría que seleccionar mejor los compañeros de pelea),pero que no te quepa duda que también porque me cuesta romper una vida sin sentido pero a la que me amoldado y con la que me cuesta romper una vez llegado al grado autómata superior que es en el que me hallo.Hace un par de años dejé las opos y no me he sentido más raro en la vida, tan raro que a los tres meses volví al redil contentísimo.Síndrome del opositor, qué nos habéis hecho hijos de puta!!!!
De todas formas, para sensación hiperjodida la de saber que este año tampoco te aburrirás .ASí que viva el estrés post-traumático con final feliz.

Faria dijo...

Somos animales de costumbres... Te cuesta adaptarte a las opos, y luego te cuesta dejarlas atrás. Pero nada, periodo de adaptación (variable y proporcional al número de años invertidos) y tan feliz.

Y si ves que tienes mono, siempre puedes hacerte preparador... :P

Anónimo dijo...

¡Enhorabuena por la plaza! Soy nueva por aquí (en la opo ya llevo tres años),hasta ahora no sabía que había este tipo de blogs,pero a partir de ahora enganchadísima.
Seguro que se acaba pronto el problema,que a lo bueno se acostumbra uno muy rápido.
Ahora los que vayáis al examen seréis ya los que haréis el curso juntos,¿no? Pues nada,a ver si hay buenas vibraciones...¡y suerte en el examen! (aunque parece que no hace ni farta)
Laura

Warletorix dijo...

Buah, tardanza imperdonable en contestaros (no sé que me pasa, pero estoy con un descontrol..) Y lo más imperdonable es que tampoco os voy a contestar ahora XD, que me voy pa' las Tarifas (está ahí RosaLe, para recogerme ;))

Feliz Año!!!

Jaspe dijo...

Con muchísimo retraso...(he estado algo ausente de estos mundos)¡¡¡ENHORABUENA!!! Además si no me equivoco ya habeís hecho el práctico ¿no? Espero que vaya sobre ruedas y ya sólo te quede afrontar esa etapa de transición a la buena vidorra.

Warletorix dijo...

Muchas gracias Jaspe! En breve sabremos que tal el práctico.
A los demás, como es una pamplina contestaros a estas alturas, sólo pediros (humildemente) perdón y compresión (sobre todo a Laura, que acaba de llegar).

Y ahora me ha entrado curiosidad de saber quien es la anónima!!